Las pensiones del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) están en riesgo debido a una mala administración, problemas demográficos, así como inequidad de aportaciones la cantidad final que reciben los trabajadores de Pemex o CFE y el resto de la población, señalaron especialistas durante el programa Periodismo de Análisis de xeu Noticias.
El contador Ramon Ortega, integrante de la Asociación Nacional de Fiscalistas, indicó que existe un gran problema demográfico, pues actualmente el 6.8 por ciento de la población es mayor de 65 años. Se prevé que para 2030, sea el 11 por ciento; para el 2040, el 15 por ciento y para el 2050, el 19 por ciento.
Lo anterior señala que habrá más adultos mayores que adultos jóvenes, lo que pone en riesgo el actual sistema de pensiones en México.
Para resolver este problema, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), propone aumentar la edad de pensión de 60 a 65 años. (De 65 a 69 años)
Aunque el sistema de Afores no es un plan inadecuado de ahorro para el retiro, en México se necesita una restructuración profunda, o de lo contrario representa una «bomba de tiempo», señaló el fiscalista.
Por su parte, el contador Oscar Castellanos Varela, vicepresidente del Colegio de Contadores, explicó que el sistema de pensiones de México es una copia del que tiene Chile, donde últimamente se han registrado manifestaciones.
Indicó que el sistema no es malo, pero fue mal implementado en nuestro país, además de que tiene la tasa de aportación para el retiro más baja de los países integrantes de la OCDE, pues actualmente se aporta el 6.5 por ciento del salario.
«La OCDE señala que la aportación mínima para tener una pensión digna debiese de ser de por lo menos un 12 por ciento», de acuerdo a la ley de 1997.
De acuerdo a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), la solución es aumentar el porcentaje de aportación, sin embargo, la gran pregunta es de donde se tomará ese aumento, si del patrón, que ya no soporta más carga tributaria, del trabajador, que tiene un salario muy bajo, o del gobierno.
Para la Confederación Patronal de México (Coparmex), el sistema de pensiones «está pesimamente administrado», porque no todos los trabajadores del país, aportan la misma cantidad, indicó Jesús Alatorre Mendieta, vicepresidente de la Comisión Laboral de Coparmex.
Puso el ejemplo de los trabajadores de Petróleos Mexicanos y la Comisión Federal de Electricidad, quienes actualmente obtienen una pensión al 100 por ciento, además de que no aportan el 6 por ciento que marca la ley, porque en sus contratos colectivos de trabajo marca que dicha cantidad la debe aportar la empresa, que recibe los recursos de los impuestos que aportan todos los mexicanos.
Mientras, un trabajador del resto de las empresas afiliadas al IMSS reciben un máximo de pensión de 6 mil pesos, lo cual es una injusticia, «porque están pagando unos por otros».
Indicó que el sistema de pensiones de México debe sufrir una modificación profunda para que todos los trabajadores del país aporten la misma cantidad, de manera individual a su pensión.
Recomendó que, en lugar de hacer una reforma, se cambie en los contratos colectivos, para que las pensiones se reciban en los mismos términos para todos.
Finalmente, Rafael Trillo, subdelegado de la Conducef en Veracruz, aceptó que la suma que reciben de pensión los trabajadores de Pemex y CFE es mayor al que el resto, porque cotizan en un sistema privado de pensiones, pero la ley así lo establece y no es retroactiva. Sin embargo, de un año a la fecha, los nuevos trabajadores de estas empresas se van a realizar aportaciones para el retiro con las afores.
Por otro lado, habló los jóvenes que empiezan a trabajar y a cotizar en el sistema de pensiones, a quienes se les recomienda realizar aportaciones extras para cuando llegue el momento de su retiro, reciban una suma suficiente.
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